Objetivos claros: transparencia dentro de la destilería
En The Macallan, nuestra historia y nuestra herencia nos define, y los siglos pasados refinando nuestro whisky y tomándonos nuestro tiempo en cada paso del proceso hace que estemos naturalmente orgullosos de nuestro whisky single malt, conscientes de nuestra obligación de protegerlo. Aún así, hemos elegido desnudar nuestro valioso proceso.
Cuando se tomó la decisión de construir una nueva Destilería y centro de visitantes en un solo edificio y bajo un mismo techo, se hizo con plena conciencia de que era un paso audaz, más allá de lo esperado. Tradicionalmente, las destilerías de whisky han separado sus centros de visitantes de la destilería en sí misma, donde se entra y se sale durante el recorrido, sin revelar al público ciertas áreas. Nosotros elegimos visionar este ambicioso proyecto como una oportunidad de cambiar las expectativas y ofrecer a los visitantes una forma de conectar con la historia de nuestra marca, de manera envolvente, cautivadora y memorable.
Se trató también de un desafío interno, ya que queríamos elevar el listón de nuestros propios estándares con respecto a lo que se consideraba una verdadera experiencia de The Macallan. El hogar de una marca que fuese la celebración de todos esos años de sacrificio y dedicación, combinados con nuestro constante impulso por innovar.



Una visión bajo un techo
Bajo ese tejado, la disposición abierta del plan resultante revela todas las fases del proceso de una sola vez.
Aunque toda la experiencia se alberga bajo un mismo techo, existen ciertas normas que debemos cumplir para garantizar la salud y la seguridad de nuestros visitantes y personal. Una de ellas es la separación de las áreas de la destilería y el centro de visitantes. Para mantener la filosofía de transparencia, decidimos revelar el proceso a los visitantes a través de un cristal de separación de 10 metros de altura. Esto fue todo un desafío en sí mismo, ya que no solo necesitaba adecuarse al espacio y cumplir con todas las regulaciones necesarias en materia de incendios y seguridad, sino que la pared de cristal más grande disponible, capaz de cumplir con dicha legislación, no se aproximaba en altura a lo que buscábamos.



Sin permitir que esto nos detuviese, decidimos construir una pared de cristal a medida. De nuevo, esto supuso un obstáculo al enterarnos de que las únicas instalaciones con capacidad para tratar de fabricar una pared de cristal de tal tamaño se encontraban en Warrington, a cientos de kilómetros de distancia. En este punto, muchos habrían decidido abandonar o transigir, no obstante, decidimos que este elemento era fundamental para nuestra gran visión, tanto literal como metafórica. De esta forma, se fueron certificando y montando una a una las piezas de una pared de muestra, enviándolas después a Warrington para someterlas al fuego y demostrar que la pared cumplía con toda las normativas de clasificación con respecto al fuego.


Las joyas de la corona
Nuestros valores y nuestra narrativa han definido nuestros principios generales y la consiguiente decisión de construir un nuevo hogar para la marca que muestra el proceso al desnudo, integrando sin fisuras nuestros seis pilares fundadores en una experiencia envolvente que revela nuestra pasión y dedicación para fabricar un whisky excepcional.