Parte 3: El ingrediente más importante de The Macallan: el tiempo
Aunque la vida a veces nos exige tomar decisiones rápidas, con mayor frecuencia suele tratarse de un juego de paciencia y perseverancia en busca de algo mayor. Sin esa espera, The Macallan no sería lo que es hoy porque aunque el agua, la levadura y la cebada son ingredientes clave en nuestro whisky, el tiempo es fundamental en cada fase del trayecto.
Una vez que nuestras barricas han recibido el sello de aprobación de nuestro Master of Wood, Stuart MacPherson, son transportadas hasta las cercanas bodegas de jerez, donde crecen las uvas de la variedad palomino en los especiales suelos de albariza de la región española de Jerez. Con un porcentaje calizo de hasta un 80 %, una de las características distintivas de este suelo es su capacidad para retener la humedad, fundamental para alimentar las cepas durante el seco verano. Una vez en las bodegas, las barricas se llenan con jerez oloroso seco y se dejan reposar y sazonar durante al menos 12-18 meses.
Utilizamos barricas de distintos tamaños, desde la barrica de roble americano de 190 litros (utilizada para el bourbon) hasta la bota de jerez más grande, con capacidad para 500 litros, fabricada en Jerez y sazonada con este licor oloroso.

BARRICAS DE ROBLE AMERICANO SAZONADAS CON JEREZ


BARRICAS DE ROBLE EUROPEO SAZONADAS CON JEREZ
